La apnea del sueño y los alimentos que le dan batalla a este trastorno  

Se calcula que, por lo menos, un 20% de la población lo sufre aunque no todos reconocen los síntomas de este trastorno. Más videos y fotos: Entrar.

La persona que sufre el trastorno de apnea del sueño, tiene pausas en la respiración mientras está dormido. Esto se produce porque las vías respiratorias se contraen o bloquean parcialmente.
Las pausas pueden durar entre unos pocos segundos y varios minutos. Puede haber entre 30 o más por hora. La respiración vuelve a la normalidad con un ronquido fuerte o con un sonido similar al que hace una persona cuando se atraganta.
 

Existen 2 tipos

• La apnea central del sueño: Se produce cuando el cerebro no envía las señales adecuadas a los músculos que controlan la respiración.
• La apnea obstructiva del sueño: Es la más común y se genera cuando los músculos de la garganta se relajan y las vías respiratorias se estrechan. De esta forma, se corta la respiración por un momento y se producen ronquidos fuertes.

Cuando una persona duerme, todos los músculos del cuerpo se relajan más. También se relajan los músculos que ayudan a mantener la garganta abierta para que el aire pueda circular hacia los pulmones. La garganta se estrecha pero no impide que el aire entre y salga de ellos. Sin embargo, las vías respiratorias de quien sufre de apnea del sueño están obstruidas de manera parcial o total.
Según el National Institutes of Health (NIH), hay varias razones:

• Tanto los músculos de la garganta como la lengua se relajan más de lo normal.
• La lengua y las amígdalas tienen un tamaño mayor que la abertura de la tráquea.
• La persona sufre de sobrepeso. El tejido graso de más puede volver más gruesas las paredes de la tráquea y, de esta forma, el interior de la misma se hace más angosto y es más difícil mantenerla abierta.
• Según la forma de la cabeza y el cuello de la persona, las vías respiratorias que están tanto en la boca como en la garganta pueden ser más pequeñas.
• Durante el envejecimiento, se limita la capacidad de las señales del cerebro para mantener los músculos de la garganta rígidos durante el sueño. De esta forma, hay más posibilidades de que las vías respiratorias se estrechen o colapsen.

Cuando las vías respiratorias están bloqueadas de manera total o parcial durante el sueño, no entra suficiente aire a los pulmones. Esto puede generar ronquidos fuertes y una descenso del oxígeno en la sangre.
Además, cuando se reduce la concentración de oxígeno y disminuye la calidad del sueño, se liberan hormonas del estrés. Éstas aumentan la frecuencia cardíaca y el riesgo de padecer presión arterial alta, ataque cardíaco, accidente cerebrovascular, arritmias e insuficienca cardíaca.
Quien sufre de apneas, pasa de un sueño profundo a un sueño liviano cuando se produce una pausa en la respiración o cuando se vuelve superficial. El sueño es de mala calidad y, como consecuencia, puede sentirse cansancio durante el día.
Los hombres, personas con sobrepeso y personas con pequeñas vías respiratorias son más propensos a sufrir de apnea. También los chicos con amígdalas y adenoides hinchadas.
Se calcula que, por lo menos, un 20% de la población lo sufre aunque no todos reconocen los síntomas de este trastorno.

Hay algunos alimentos que ayudan a reducir la apnea del sueño. Entre ellos se encuentran:

• Alimentos con melatonina: Se trata de una sustancia vinculada con el control de los ritmos circadianos y el alivio de la apnea de sueño. Los ritmos circadianos son cambios físicos, mentales y conductuales que siguen un ciclo aproximado de 24 horas y que responden a la luz y la oscuridad en el ambiente de un organismo.
  La glándula pineal libera la melatonina durante la noche pero se puede aumentar su producción a partir del consumo de alimentos que la contengan.
  Algunos de los alimentos que la tienen son: frutos secos y semillas, cerezas, arroz, maíz y tomates, entre otros.

• Alimentos con calcio: El consumo de calcio ayuda a mantener un equilibrio en los niveles de melatonina. Los productos con calcio reducen el insomnio y ayudan a controlar los ronquidos generados por la apnea del sueño.
  Entre los alimentos que contienen calcio se encuentran: leche, yogur, queso, huevo y frutos secos.

• Alimentos con potasio: Ayudan a conseguir una buena calidad de sueño. Además, relajan las vías respiratorias y disminuyen los síntomas de la apnea de sueño.
  El potasio se puede encontrar en alimentos como: bananas, semillas, frutos secos, avena, etc.

• Alimentos con triptófano: Hay alimentos que fomentan la sensación de bienestar ya que contienen triptófano, un aminoácido fundamental.
  Con éste se sintetiza la serotonina, un neurotransmisor que aumenta la sensación de relajación y, por lo tanto, ayuda a tener una buena calidad de sueño.
  Algunos alimentos que lo contienen son: carnes magras como el pollo, banana, atún, frutos secos y mariscos, entre otros.

• Alimentos con magnesio: El mineral magnesio reduce los efectos de la adrenalina e incrementa la sensación de sueño y relajación.
  Se encuentra en alimentos como: espinaca, nueces, pescado y soja, entre otros.

• Alimentos con vitamina B6: Al consumir alimentos ricos en esta vitamina, se relaja el cuerpo, se alivia la garganta y se previene los sonidos molestos producidos por la apnea del sueño.
  Los productos con vitamina B6 pueden ser: frutos secos, salmón, atún, etc.

 

Créditos:

• Publicado en el Sitio Urgente 24. (10/02/17).