Comodoro Rivadavia - Chubut Argentina
"Capital del Viento"

Economía

Después del cáncer de mama, creó una marca de bikinis y mallas post mastectomía
 


La ciudad valletana se convirtió en los últimos años en un destino atractivo para los inversores de origen chino.

  • Más videos y fotos: Entrar.

  • El año próximo se instalará el más grande de la región: llega a 5 mil metros cuadrados. El interés se centra en seguir expandiéndose hacia el sur. Más allá de las quejas y suposiciones del mercado comercial local, no hay ningún tipo de acuerdo impositivo entre Argentina y China que les permita vender más barato. La ventaja que tienen es la compra de grandes lotes de mercadería que les permite luego, distribuirlos en los miles de sucursales que tienen en distintos puntos del país.
    En este informe, Jornada revela el impacto social, económico y comercial que la instalación de los autoservicios tiene en la actualidad en una ciudad como Trelew. Por un lado la mirada desde la comunidad, sus formas de organización y su visión sobre el negocio.
    Por otro lado, un repaso en profundidad para determinar si cumplen con lo establecido por las normativas vigentes. ¿Existen multas o denuncias en Defensa del Consumidor? ¿Realmente cuentan con un régimen especial? La última ordenanza aprobada que reza sobre la radicación de grandes superficies y lo más importante: la palabra de los protagonistas.

    Actualmente hay en Trelew un total de 20 supermercados chinos. El dato surge del Sindicato de Empleados de Comercio y confirma que tan sólo se generaron con estos autoservicios 6 fuentes de trabajo. Dicho punto es uno de los más cuestionados por el sindicalismo para la instalación de este tipo de comercios. De hecho, hay otros 7 autoservicios de cadenas no asiáticas donde en lugar de 6, son 25 las fuentes laborales que generan en la ciudad.
    Por otra parte, según confirmaron a este diario desde la Cámara que agrupa a los autoservicios de origen asiático, en 2018 se estará abriendo otro mercado chino de amplias dimensiones. El terreno llega a los 5.000 metros cuadrados, de los cuales tendrá 3.000 bajo techo y el resto con estacionamiento. La estructura está siendo levantada sobre la intersección de las calles Musters y Michael Jones y en los primeros meses del año próximo ya estará comercializando en la zona.

    Dentro del empresariado que agrupa a la comunidad china, existe un fuerte interés por seguir expandiéndose en el sur del país, donde ven un terreno fértil y con una cuota de consumo muy importante como para asentar un gran negocio.
    Si bien el fenómeno de los comercios asiáticos de barrio comenzó allá por los 90´ en el país, se puede decir que el impacto social dentro de la comunidad de Trelew comenzó a verificarse un año atrás con la instalación de uno de estos negocios en un local que subalquilaba la Cooperativa Eléctrica. Fue en el corazón de barrio progreso.
    La dinámica fue, al igual que en otros puntos del, país vertiginosa. Y se consolidó en el tiempo, a punto tal que pasó a considerarse un tipo más de comercio, denominado como “los chinos”.

    Uno de los puntos de debate que surge habitualmente tiene que ver con los bajos precios que manejan estos negocios y se plantea el conflicto de la “competencia desleal” por parte de algunos comerciantes.
    Pese a que se tejen muchas especulaciones, hoy dentro de los convenios entre Argentina y China no existe ningún tipo de ventaja impositiva para los supermercados del país oriental en lo que hace a su instalación y el cobro de impuestos como la habilitación comercial, ingresos brutos y demás.
    Sí producto de la relación bilateral existen acuerdos de comercio entre ambos países, aunque están relacionados con el comercio exterior, el intercambio de mercadería y no con el mercado interno argentino.

    Una de las grandes ventajas tiene que ver con la organización. Los inmigrantes de China dueños de algún comercio están agrupados en una Cámara que los representa desde Buenos Aires y que puede obtener diferentes beneficios, por ejemplo con la compra de grandes lotes de mercadería para luego distribuirlo en los miles de autoservicios distribuidos en toda la Argentina. Son los beneficios de la compra a gran escala, con la adquisición en algunos casos de una producción completa. Ello les permite por lo tanto mejores condiciones de negociación con fábricas y distribuidores.
    Y un factor adicional relacionado con lo anterior. En cada lugar que se radican suelen explotar los negocios de pequeñas pymes, con algunos rubros en particular como el de limpieza y de esa forma se convierten en un socio conveniente para este tipo de emprendimientos, sobre todo por la magnitud de lo que pueden vender.
    Por otra parte, no suelen estar sindicalizados y muchos de los que trabajan son familiares. La mano de obra también es un factor por el cual también obtienen condiciones competitivas.
    Asimismo, muchas veces la inversión suele ser compartida. Varias familias se juntan para conformar un negocio y administrarlo. Ello permite mayor facilidad en cuanto a la circulación de dinero y la apuesta permanente para abrir nuevas sucursales.

    Yolanda Durán está en la presidencia de la Cámara Empresarial de Desarrollo Argentino y Países Asiáticos (CADEAPSA) hace ya 27 años. Trabajó con los primeros autoservicios chinos que desembarcaron en el país. Explicó a Jornada cómo logran conseguir tan buenos precios. “Es muy simple. Trabajan desde las 7 de la mañana hasta la 1 de la madrugada. Cierran el súper y siguen reponiendo mercadería para el otro día. Segundo nos bajamos en el margen de utilidades y por eso somos competitivos para el sector. No hay otro secreto. No entiendo a la AFIP que nos llaman para preguntar cómo es que vendemos tanto. Y yo les digo ´ponete contento´”.
    Marcó que “la otra virtud es que nos proveemos de pequeñas pymes de cada lugar. El que hace trapos de piso, el que vende dulce de la zona, si hace fideos se los compra. Se mira el mercado de proximidad. Genera una revolución. El que hace queso. Acá son todos chiquitos que viven del supermercado y deberían ponerse contentas las autoridades de cada lugar”.

    Sobre el nuevo supermercado que abrirá, explicó que “ya se compró el terreno, es de 3.000 metros cuadrados de superficie para la venta de productos y los otros 2.000 para estacionamiento. Está avanzado y el año que viene estará funcionando”.
    “Se unieron varios supermercadistas de proximidad asiáticos y compraron en conjunto el predio y en conjunto hacen la inversión para poner productos de consumo masivo. Productos comestibles. También venderá bazar, ropa y demás”.
    Durán reflejó que el interior y el sur en particular es un lugar estratégico para la expansión: “Siempre digo que hay que ir para el interior, hay espacio, y más el sur que me interesa porque veo que hay una cadena o dos, una que es líder y con precios que cobran que te sacan un ojo de la cara”.

    “En el sur tenemos que ir con la variedad de productos que tenemos que son primeras y segundas marcas, a precios totalmente imbatibles. Y nosotros vamos a llegar con precios que no se comparan a toda la gente. Y seguramente vamos a mandar azúcar, harina, todos los productos de consumo masivo que van para allá para abrir esta nueva boca en Trelew”.
    Frente las críticas que surgen por “competencia desleal”, la titular de la Cámara Argentino-China respondió: “El más chiquito tiene que salir a competir, los chinos pelean el mercado y la gente nos pide que vayamos. Nos mandan los lugares, los locales, teléfonos y contacto la propia gente de cada lugar. En la Cámara recibimos cantidad de locales y terrenos a nivel nacional. Que nos ofertan para que nos pongamos con un súper de proximidad”.
    Por otra parte marcó que en algunas oportunidades son perseguidos por algunos organismos de control: “Por las municipalidades que te cobran tasas que no corresponden, por el Ministerio de Trabajo, por la AFIP. Es increíble. La mayoría son familiares en el negocio, se tributa como corresponde. Hay un atropello de diferentes organismos municipales, provinciales”.

    Más allá de la necesidad de buscar una ordenanza que regule la instalación de supermercado “tipo express”, desde la Cámara de Comercio del Este del Chubut muestran una postura moderada. “No deberían superar los 100/300 M2 lo cual no estarían contempladas en las ordenanzas actuales, produciéndose un vacío legal”.
    Al mismo tiempo manifiestan en un documento que “se puede entender a los comerciantes, pero es técnicamente imposible e inconstitucional prohibir los súper chinos”. Se agrega al respecto que no se puede hacer una ley direccionada, ya que atenta contra el derecho de trabajar y va contra la libre competencia”.
    “Iría contra la no discriminación, sería una ordenanza que impediría el derecho constitucional de cualquier residente en el país”, además de la posibilidad de que se generen costosos juicios, algo que ya ocurrió en otros municipios del país”.

    Asimismo desde la CICECh se plantea que “los súper chinos se manejan con grandes ventajas que a nuestro criterio los comercios locales bien podrían adoptarlo. Estar nucleados en una Cámara, autorrergularse manejando con un pool de compra a precios competitivos”. Y añaden que “ellos tienen organización y cultura muy firme, y cuentan con mano de obra llamada familiar”.
    Más allá de dicho posicionamiento, también se marcan algunos parámetros que si podrían legislarse o controlarse. “Deberían contar con estacionamiento propio, cámaras frigoríficas, depósitos adecuados, además del fiel cumplimiento de las leyes, ordenanzas y normas dictadas a nivel municipal y nacionales, con estrictos controles (seguridad e higien, bromatológico, laborales, impositivos, etc).
    Por último se expresa que “proponemos contar con un pool de compras, aunar los esfuerzos que por lo general son estrategias individualistas para lograr por consenso el cierre dominical de todas las grandes superficies e incluir en estos desde los 100 metros, permitiendo con ello potencia el comercio en los barrios”.

    Lo que controlamos en supermercados chinos y en todos los supermercados es que tengan los precios exhibidos. Estos autoservicios en particular presentan algún problema al momento del cobro: aplican intereses en pago con tarjeta de debido o crédito. Eso debe ser denunciado”, expresó a Jornada el director de Defensa del Consumidor, Fabio Prato.
    Aclaró que no existe una legislación concreta para los supermercados de origen oriental. “No importa si es chino, boliviano o argentino. Sea hipermercado o mercado de barrio. La legislación de Defensa del Consumidor es para todos la misma. Se detectan algunos faltantes de precios. Cuando es así, se les hace la infracción correspondiente. Nada distinto a los otros hipermercados”, expresó.

    El funcionario explicó que en la actualidad no existe una rígida lista de precios a respectar. “Los precios están liberados. Controlamos que se exhiban, que tengan los precios indicados. Si hay financiación que se indique, que no haya diferenciación de tarjeta de débito y crédito. A veces pasa. Tienen posnet pero les hacen diferenciación de precios. No hay que permitirlo y denunciarlo”, remarcó.
    Prato informó que están trabajando actualmente en las exigencias contempladas dentro de la categorización de monotributistas. “Para el 31 de marzo van a estar ya todos operando con ese sistema de pago. Ese control lo hace Inspección General y AFIP. Nuestro control es que no haya diferenciación entre tarjeta de debido, tarjeta de crédito y contado. Los consumidores tienen que denunciarlo si así es”.
    Se refirió a las visitas periódicas que hacen a los comercios de origen chino y aseguró que el trabajo lo realizan con regularidad y cumpliendo las normativas vigentes. “Como en cualquier otro comercio, decimos cuáles son las leyes que deben cumplir. Se adecuaron a lo que dijimos. No tenemos denuncias concretas. Es como cualquier comercio común. En algunos casos, no aceptaban tarjetas de débito y no tuvieron problemas en revertirlo. Si está el presupuesto es suficiente. Existe la libertad de mercado”.

    "José” Tai arreglaba motos en China y aún recuerda con nostalgia su anterior oficio y su gusto por ese tipo de rodado. Es originario de la provincia de Fujian, como la gran mayoría de los inmigrantes chinos que habitan en la Argentina y al igual que ellos, el comercio es desde hace dos décadas su principal actividad en el país.
    “Me gusta en Trelew, acá más tranquilo” dice este comerciante oriental cuya familia administra al menos otros tres locales comerciales en nuestra ciudad, al que han sumado ahora una nueva boca de expendio sobre avenida Hipólito Yrigoyen al 600.
    José -el nombre que eligió para identificarse en nuestro país, como hacen casi todos los chinos que hace varios años que están en Argentina- hace pocos meses que está afincado en Trelew, pero habla un español bastante fluido producto de dos décadas de habitar en el país, primero en el partido de La Matanza (Buenos Aires) y luego en Rosario (Santa Fe).

    “Rosario me gustaba, pero ahora mucho lio. Miramos televisión y está muy jodido, no me gusta” le dijo este comerciante chino a Jornada en su local, del cual asegura ser socio y tener cuatro empleados en forma directa, además de contar con venta de carnes, verduras y fiambres de manera tercerizada, a través de un subalquiler de esas dependencias.
    Sobre el funcionamiento del comercio y el sistema comercial que los rige para poder tener buenos precios, confía en que “trabajamos en familia, compramos en cantidad, entonces hablamos con los mayoristas y pedimos todos. Los pedidos son más grandes y más baratos”.
    “Aparte nosotros hacemos todo trabajo familiar, con eso bajamos un poquito la ganancia, entonces los precios son muchos más baratos que otros” cuenta Tai y compara los valores con los que comercializan respecto a las grandes superficies comerciales que históricamente funcionan en la ciudad.

    A diferencia de lo ocurre en provincia de Buenos Aires, donde los comercios chinos están nucleados y cuentan incluso con marcas propias, “acá en Trelew no” dice José, pero asegura que el trabajo agrupado les permite comprar más barato y por otro lado el trabajo familia les permite bajar costos.
    En Trelew la familia de José tiene un local sobre la avenida Eva Perón y Galina, otro en Inmigrantes y Ameghino y un tercero sobre María Humpreys, a pocos metros del ingreso al barrio este. De las cuatro bocas de expendio, tres están ubicadas sobre avenidas o cercas de ellas.
    En cuanto a la comunidad china en Trelew, el comerciante chino dijo que “algunos nos conocemos, otros no. Está la familia y algún otro que conocemos, con otros nos conocimos aquí”.

    Nicolás Weng es otros de los comerciantes chinos que está afincado en la ciudad y en su caso hace siete años que lleva adelante un emprendimiento comercial en el barrio Padre Juan Muzio. Hace pocos meses fue una de las voces que se sumó al debate por las iniciativas sobre nuevas regulaciones para la actividad comercial en la ciudad y que apuntaban especialmente a modificar las condiciones para los denominados “supermercados chinos”.
    Weng, propietario del comercio “Primavera” de calle Urquiza, dijo hacía 17 años residía en el país y se consideraba a sí mismo “argenchino”.
    “Hay cosas que tienen razón, pero no es sólo el tema del pago. El tema económico no es parejo, unos días sí es bueno, y otros días cae mucho y nosotros queremos vender mejor, pero no solo yo pagar más empleados, pagar más postnet” dijo el comerciante oriental, quien aseguró que exigir una cantidad mínima de empleados a un comercio que recién abre es ilógico ya que no se sabe cuan será su rentabilidad.

    En aquel momento y ante la consulta realizada desde FM Tiempo Trelew (91.5) Weng había contado que tenía dos repositores y una fiambrera a tiempo completo, otra fiambrera que trabaja un par de horas y una cajera de medio día, pero además trabaja él y su esposa. “Si no trabaja la familia no rinde nada; no voy a tomar más gente porque si mañana cae la venta, ¿con qué voy a pagar?” dijo.
    El comerciante chino dijo “si el comercio no está habilitado, ¿cómo saber cuántos empleados necesitas? Yo hoy estoy trabajando con mi mujer, pero si lo hiciera pagando más gente, no es tan fácil” comentó en su momento.
    Nicolás descartó muchos de los mitos que existen sobre los mercados chinos que se afincan en la ciudad. “La gente está con el tema del IVA y eso, pero nada de eso me ayuda, es todo muy raro” dijo el comerciante y aseguró “trabajo acá, gano acá, pago mis impuestos acá”.
    El comerciante también desmitificó cuestiones tales como que ahorran costo en energía mediante el apagado de heladeras y afirmó que “si se va un cliente por eso, después se van a ir otros. Sin clientes no vale nada esto”.

    Una gran mayoría de los inmigrantes chinos que arriban nuestro país provienen de Fujian, una provincia ubicada en el suroeste de ese país, bañada por las aguas que separan el continente de la isla de Taiwan. Pero ¿Cómo ingresan al país?
    Si bien la llegada de una fuerte corriente de inmigrantes chinos a la Argentina tiene más de dos décadas, en nuestra zona ese fenómeno se remonta a los últimos cinco o seis años, en los que ese proceso se ha hecho evidente a partir de la apertura de comercios administrados por orientales.
    Los chinos que ingresan a la Argentina deben hacerlo mediante una visa para turistas autorizada por el Ministerio de Relaciones Exteriores a través de los consultados argentinos en el exterior.
    Una vez en el país, la Dirección Nacional de Migraciones les otorga la permanencia por el periodo de hasta 90 días máximo, tras el cual deben salir del país, ya que en caso de ser detectados dentro del país superado ese límite de tiempo o bien que hubiera sido detectado su ingreso por un lugar no habilitado, se considera una falta gravísima lo que implica de acuerdo a la nueva normativa un motivo de expulsión casi inmediata.

    Para un nuevo ingreso los ciudadanos chinos deben solicitar una visa de trabajo temporal por un año, que puede luego prorrogarse y tras tres años en el país daría lugar al inicio de los trámites de residencia definitiva. Este trámite también está a cargo de la Dirección Nacional de Migraciones.
    Sin embargo existe otra alternativa para la llegada de ciudadanos extranjeros al país. En este caso, un inmigrante chino que ya cuenta con la radicación definitiva en nuestro país, tiene la opción de inscribirse en un registro de llamantes, lo que habilita a esa persona a requerir el ingreso de manera directa de familiares, considerando siempre de manera a quienes se encuentren en línea ascendente o descendente directa: padre, madre o hijos.
    La existencia de un hijo argentino permite un criterio diferencial para los extranjeros que realicen el trámite de visado de trabajo o posteriormente los trámites de radicación, al igual que el ingreso de un cónyuge de la persona que ha solicitado el ingreso al país, ya sea un visado de trabajo provisorio o hubiera sido requerido por otro ciudadano chino inscripto en el registro de llamantes.
    Sin un cupo máximo establecido para los llamantes, cada inmigrante que obtiene su residencia en el país puede llamar a tantos familiares como desee, siempre que los mismos cumplan con los requisitos impuestos por la legislación nacional y los tratados internacionales en materia de inmigración.

    Si bien en Trelew la instalación de autoservicios de origen chino va en expansión, la creación de fuentes de trabajo preocupa en el Concejo Deliberante y se vieron en la obligación de actualizar la normativa actual obligando a los propietarios de nuevos emprendimientos que utilicen mano de obra local. “No vemos que generen puestos de trabajo sino un beneficio a la ciudad porque ellos utilizan otro sistema de compra, aparentemente tienen pool, se deben agrupar y conseguir precios especiales. Eso hace que en Trelew hoy tengan una aceptación”.
    Así lo dijo el concejal del Frente para la Victoria Oscar Villarroel, quien tomó la iniciativa de impulsar la actualización de la normativa que reza sobre la instalación de autoservicios de grandes superficies. “Hicimos una ordenanza general, no es para un sector en especial. Lo que apunta es a regular la actividad porque hay un vacío en lo que es la instalación de un mercado”.
    Apuntó el edil que “la proliferación de muchos autoservicios ha hecho que uno se preocupe porque estas cadenas que se están instalando no vemos que generen puestos de trabajo sino un beneficio a la ciudad porque ellos utilizan otro sistema de compra, aparentemente tienen pool de compras, se deben agrupar y conseguir precios especiales. Hacen que en Trelew hoy tengan una aceptación”, insistió.

    Y dio números. “Hay 27 autoservicios en Trelew, 5 son tradicionales, tienen alrededor 35 empleos. Contra las nuevas inversiones de 19 o 20 que solamente encontramos 6 empleados. Lo que decimos es, que las reglas sean claras para tener libre comercialización y competencia pero dentro de las reglas de juego del país. Y la ciudad, se tiene que ordenar. Los autoservicios hasta 500 metros cuadrados, usan agua, energía y cámaras. Muchas veces con el problema del verano, necesitan que estén adecuados. Hay veces que no tienen playas de estacionamientos. Abaratan canasta familiar pero con problemas de estacionamiento. Fundamentalmente en bebidas alcohólicas”, sostuvo.
    Confirmó además Oscar Villarroel que fue notificado del flamante hipermercado que instalarán los comerciantes chinos en la zona sur de la ciudad. “Es un predio de más de 3 mil metros cuadrados. El salón de ventas es de 975 metros cuadrados, va a destinar 57 lugares para estacionamiento 3 locales a alquilar, sobre la calle Michael Jones. Lo que le pedimos al Ejecutivo es que hay una ordenanza vigente que hay que llamar a comisión para que vea el impacto ambiental en la zona. No les decimos que no a las inversiones. Se ha tomado como un tabú que parece que no queremos que se instalen inversiones pero las cosas tienen que ser claras en la parte impositiva y laboral. Hay algunos que no usan posnet y no se adecuan a las leyes vigentes. Tengo registro que hay un solo titular para dos o tres autoservicios. Los nombres a veces, es difícil detectar si son familiares o no”, ejemplificó.
    Para finalizar, Villarroel enfatizó en que “no necesitamos que inviertan y se lleven el dinero y no inviertan en fuente laboral. La UOCRA pide mano de obra. Nosotros también. Son lugares donde pueden generar puestos de trabajo y no lo están haciendo”, concluyó.

    La ordenanza que rige para la instalación de súper e hipermercados ha sido modificada el mes pasado por los concejales. Regula la cantidad de metros cuadrados que deben cumplir, la distancia de uno a otro, el personal que deberá emplearse y que deben hablar el idioma español.
    Los fundamentos indican que “ante la imperiosa necesidad de vislumbrar normativas ante las nuevas tendencias de la actividad comercial minorista, de venta de productos alimenticios y otros rubros bajo el sistema de autoservicios y considerando que es menester la actualización de las normas vigentes al constante cambio de la economía local con la finalidad de lograr una coordinación compatible de la regulación legal con la realidad de la actividad comercial de la ciudad, a fin de evitar la propagación de locales y emprendimientos sin criterio racionales, es obligación de las autoridades generar políticas de creación de empleo”.
    En este marco el Departamento Ejecutivo Municipal debe proveer el marco regulatorio en las habilitaciones comerciales , preservando de esta manera la actividad comercial y económica local respetando la igualdad de oportunidades, velando por la equidad y resguardando la competencia leal de sus habitantes.

    En el artículo 1º de la ordenanza se establece que toda persona física o jurídica que solicite la habilitación de supermercados, autoservicios, mercado y/o cadena de Distribución en relación con dicha comercialización, se regirán por las disposiciones de la presente ordenanza y la reglamentación que a tal efecto dicte el departamento ejecutivo municipal. Serán definidos como a) Supermercado y Autoservicio: al establecimiento minorista polirubro, cuya política de compra, venta administración sea dirigida por una empresa o persona física y que expendan sus artículos por sistema de autoservicio, teniendo como rubros limpieza, higiene bazar, perfumería etc., en un local con una superficie de hasta 500 m2.
    En el tercer artículo se establece que los titulares de los establecimientos comerciales comprendidos en la ordenanza, que el 80% del personal que trabaja o cumple alguna función, sean personas que se encuentren en condición de residentes en esta ciudad. Del 80% del personal, un empleado con idioma del lugar deberá disponer en línea de cajas para la atención al público.
    Asimismo, en el artículo 5º, se fija como distancia límite de emplazamiento entre locales de similares características, que no podrá ser inferior a los 600 ms a la redonda, respecto de otro local o establecimiento ya habilitado. Se deberá además, acreditar una residencia ininterrumpida mínima 2 (dos) años en la ciudad de Trelew, con anterioridad al inicio del trámite de habilitación, con referencias comerciales.
    Por último, el artículo 7º establece que para la habilitación de los supermercados, autoservicios mercados y/o cadenas de Distribución las personas físicas y jurídicas titulares del comercio deberán informar el monto total de la inversión y justificar el origen de los fondos mediante la entrega de la siguiente documentación respaldatoria.

     


    Créditos:


     
    Temas Relacionados
    Economía
    Página Principal